Esta historia inició cuando Julio Ernesto Estrada, en sus años mozos, viajó a Nueva York como integrante de Los Corraleros de Majagual y tuvo la oportunidad de acercarse a los grandes protagonistas de un nuevo movimiento musical que apenas se estaba conociendo con el nombre de salsa.
Fruko llegó a inquietarse por este género a mediados de la década del sesenta y empezó a proponer la idea a los directivos de Discos Fuentes, Pedro y José María, de crear una agrupación colombiana con este estilo.
La orquesta Fruko y sus Tesos, nació después que José María y Pedro Fuentes vieron en Fruko un futuro muy promisorio. Ellos creyeron en el proyecto y lo impulsaron con la grabación de un primer larga duración en 1970, el cual, como todos los ensayos que empiezan, apenas si tiene acogida.
Esta eventualidad, ya prevista, hizo que Fruko y los señores Fuentes reanudaran sus esfuerzos, motivación que hoy agradece toda Colombia pues sin su trabajo, la salsa colombiana habría demorado mucho por nacer. A partir de entonces inició una carrera meteórica hacia el estrellato.
La nómina de músicos de la banda inicial estaba integrada por Julio Ernesto Estrada «Fruko»; como director y a cargo del bajo; el pianista fue Hernán Gutiérrez, quien falleció en Miami; Jesús «Chucho» Villegas era el responsable de la campana y los bongóes, y Fernando, su hermano, en las congas; Jorge Gaviria como primera trompeta y Carlos Escobar «Pajarilla» como segunda; Mariano Sepúlveda en la guitarra eléctrica, ejecutaba el tiple para reemplazar la sonoridad del tres cubano y hacía los coros; el primer trombón estuvo a cargo de Gustavo García, «Pantera»; el segundo con Gilberto Hernández «Tripaseca»; en los timbales Rafael Benítez y Germán Carreño, en la trompeta bajo. La voz líder estuvo a cargo de Humberto Muriel.
La orquesta Fruko y sus Tesos, nació después que José María y Pedro Fuentes vieron en Fruko un futuro muy promisorio. Ellos creyeron en el proyecto y lo impulsaron con la grabación de un primer larga duración en 1970, el cual, como todos los ensayos que empiezan, apenas si tiene acogida.
Esta eventualidad, ya prevista, hizo que Fruko y los señores Fuentes reanudaran sus esfuerzos, motivación que hoy agradece toda Colombia pues sin su trabajo, la salsa colombiana habría demorado mucho por nacer. A partir de entonces inició una carrera meteórica hacia el estrellato.
La nómina de músicos de la banda inicial estaba integrada por Julio Ernesto Estrada «Fruko»; como director y a cargo del bajo; el pianista fue Hernán Gutiérrez, quien falleció en Miami; Jesús «Chucho» Villegas era el responsable de la campana y los bongóes, y Fernando, su hermano, en las congas; Jorge Gaviria como primera trompeta y Carlos Escobar «Pajarilla» como segunda; Mariano Sepúlveda en la guitarra eléctrica, ejecutaba el tiple para reemplazar la sonoridad del tres cubano y hacía los coros; el primer trombón estuvo a cargo de Gustavo García, «Pantera»; el segundo con Gilberto Hernández «Tripaseca»; en los timbales Rafael Benítez y Germán Carreño, en la trompeta bajo. La voz líder estuvo a cargo de Humberto Muriel.